“La chancla que yo tiro no la vuelvo a levantar”, escuché a una mujer que rondaba por los 35 decir a sus amigas en un bar el fin de semana. Estaba acompañada de un séquito de mujeres que cantaban con ella canciones de despecho. No pude dejar de formularme preguntas sobre su situación: ¿por qué habría terminado con su pareja?, ¿habrá sido un arranque de enojo?, ¿el problema no tenía solución?
Un estudio publicado en Journal of Family and Economic Issues dio a conocer las tres principales causas de divorcio en parejas. La primera es por discusiones sobre finanzas, la segunda por problemas de comunicación y la tercera por infidelidad. La que más me causó asombro fue la segunda razón, puesto que se da ya sea por miedo a generar más discusiones, falta de confianza o por desinterés por conocer la opinión de su pareja.
En México, el divorcio ha ido en aumento un 4.3 por ciento anual de 1990 a nuestros días. En 2013 se registraron poco más de 108 mil divorcios. Las causas varían, unas resultan más graves que otras pero, de los problemas menores, ¿esto se deberá a que la chancla que algunos tiran no la vuelven a levantar?
Esta conocida frase me estuvo dando vueltas en la cabeza y si la analizamos, mucho tiene que ver con la falta de interés para solucionar los problemas. Por eso les comparto algunos planteamientos que rescaté:
Si bien la solución de conflictos es un arte que pocos saben manejar, es de vital importancia aprender a desarrollarla, no sólo por el bien de nuestra relación en pareja, sino también por el de nuestras relaciones familiares y profesionales. Además, aprender a enfrentar conflictos fortalece nuestro carácter para la toma decisiones.
Si bien algunos problemas llegan a puntos sin retorno, es de vital importancia tener una comunicación efectiva durante el proceso para llegar a buenos términos. La mediación es un excelente medio para reconocer lo que es mejor para las dos partes sin afectar de manera negativa a alguno de los involucrados. Cerrar ciclos sin resentimientos y con la satisfacción de haber recibido lo justo tiene un impacto positivo para el comienzo de nuevas etapas.
Por salud física, mental y financiera es mejor resolver un conflicto en el que las dos partes estén de acuerdo que por medio de procesos engorrosos que durarán un largo periodo y que a la larga resultarán costosos. Pero para que sea posible un acuerdo exitoso es necesario dar a conocer qué es lo que las dos partes necesitan para sentirse satisfechos, es por eso que el silencio nunca es una buena opción.
En PSR Asesores Empresariales somos expertos en mediación. Acércate con nosotros y recibe nuestra asesoría, estamos seguros que podemos apoyarte.