Siglo XVI: Romeo se enamora de Julieta pero los padres de ambas partes se oponen a aquel amor. Entre gritos y sombrerazos, los jóvenes amantes se encuentran con un amor imposible que los orilla a la muerte antes que ser separados. Romeo y Julieta se mueren, los padres lloran, Shakespeare termina su obra y el mundo se queda con las ganas de leer un final feliz.
¿Y si cambiamos un poco la historia, la actualizamos y le agregamos el proceso de mediación?
Siglo XXI: Romeo y Julieta se enamoran y, como era de esperarse, los padres se niegan a ese amor. Intentan separarlos pero, a través de un proceso de mediación y con ayuda de un mediador certificado, los amantes logran llegar a un acuerdo con sus padres y todos quedan contentos evitando la muerte de dos enamorados. La historia resulta ser menos dramática, más práctica, con beneficios para todos y con un final feliz.
La mediación en nuestros días ha resultado ser una opción viable y con múltiples ventajas para el que opta por ella. Menos trámites, menos tiempo y dinero invertido y más satisfacción a los involucrados son razones por las cuales hasta Romeo y Julieta hubieran apostado.
Para fortuna de muchos más, además de Romeo y Julieta, también existe la mediación comercial, la cual beneficia a las empresas/empresarios que buscan solucionar sus controversias con clientes externos, proveedores, socios, etc. La mediación se distingue por beneficiar y convertir a todos los involucrados en protagonistas de sus propias historias.
En PSR Asesores Empresariales estamos comprometidos con tu éxito por lo que te apoyamos en mantenerlo. Te invitamos a conocer más sobre lo que podemos hacer por ti.